domingo, 8 de febrero de 2015

Para ti

Hay cosas de las que no me gusta hablar, pero que a la vez quisiera gritar.  Es que me hacen sentir que soy más vulnerable y eso no me lo enseñaste.  Me enseñaste a ser fuerte aunque esté herida y a no dejarme llevar por la vida, sino a tomarla yo y ser su guía.  Pero me pasa. Me derrumbo.
Nunca me lo dijiste, pero tus ojos hablaban y tu actitud me lo decía. Quisiste que fuera feliz, que me bailara la vida.  Tu amor, lo más grande que he conocido, desde que te vi por primera vez….Yo sé que tú también te enamoraste.

Quisiste que tuviera mariposas revoloteando a mi alrededor y las tengo.  Quisiste que tuviera alas y las tuve, no estoy segura que quisieras que volara, pero me enseñaste a volar y volé, pero tú te quedaste, aunque siempre estuviste.
Quisiste que soñara y aprendí a soñar y sueño, también sueño contigo….¿y sabes?, a veces mis sueños se hacen realidad antes de saber que son sueños, esto sí que es mágico.  No me lo enseñaste, pero sé que lo deseaste para mí, con tanta fuerza que sé que por eso ocurre.
Quisiste que entendiera la música para poder cantarme y así entenderte mejor.  Tus huellas se plasmaron como notas en mi pentagrama y tienen una melodía deliciosa. Me enseñaste que la vida es música y es danza y hay que vivirla cantando y bailando.
Quisiste que tuviera ilusiones, que amara hasta el infinito, que tuviera confianza y esperanza.  Las sigo teniendo y sigo amando, eso me hace sentir amada.
Quisiste que mi vida tuviera los colores del arcoiris y me regalaste una paleta y muchos pinceles y lienzos, y me enseñaste a pintar. También quisiste que brillara y me regalaste una estrella, aun la conservo, siempre está conmigo, aunque a veces no brille, pero su fuerza y su encanto están allí.
Quisiste que leyera tus libros y aprendí a leer como tú.
Me enseñaste que la comida hecha en casa es más sabrosa, porque tiene el amor como ingrediente. Y si comes de esa comida hecha con amor, puedes salir y bailarte la vida sin miedo, con la seguridad de que las cosas bien hechas siempre son recompensadas.
Lo más dulce quizás tu sonrisa y esa mirada.  Me mirabas como un pintor a su obra terminada, nos reíamos y arreglábamos el mundo.  ¿Será que lo arreglaremos por fin un día?
Construiste un mundo casi perfecto a mi alrededor, quisiste que mis pasos al andar por la vida fueran firmes, seguros, ligeros.  Gracias a ti camino y vuelo a la vez y mis mariposas siguen revoloteando a mi alrededor.
Te tengo. Te atrapé una vez y no te he soltado, pero te hice creer que eras tú quien me atrapó, sólo para que pudieras presumir.
He hecho muchas de las cosas que has querido, yo creo que te pasó como a veces a mí, que tus sueños se hicieron realidad antes de saber que eran sueños.  Seguramente me soñaste sin saberlo.  ¿Lo ves?  También me gusta presumir, como a ti.

Pero, ¿sabes una cosa? No he podido complacerte en todo, y quisiera hacerlo porque sé que es tu deseo.  Sé que no querías que llorara… entonces, no debiste haberte ido… Te hecho tanto de menos…

1 comentario:

  1. Quisiste que lo que imaginabas no sucediera, ocurrió, y te aferras a tu sueños para que no sean destruidos, no pases a la realidad, así te será más fácil seguir viviendo. Reflexión de un hermoso motivo.

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