sábado, 18 de abril de 2015

Dos Lirios

De repente, ese príncipe que se mantuvo por años en sus sueños apareció, y como en un cuento la deslumbró con su presencia. No tenía la armadura metálica que le protegía de las armas punzantes que en su imaginación le perseguían. Llevaba en cambio una elegante corbata, que le disimulaba en el pecho los latentes suspiros que de su corazón emanaban. No tenía tampoco una lanza imponente en sus manos, en cambio llevaba una pluma y su tinta, con la que escribía los versos que le brotaban del alma.

sábado, 11 de abril de 2015

Como respuesta una flor

Simplicidad y belleza, perfección y simetría, en una sola expresión. Magia de la naturaleza, adorno de los paisajes, refugio de los secretos. Aroma, color, suavidad, como un suspiro de añoranza, como un beso que se entrega suave. 
Símbolo de un adiós que no quiere irse. Cómplice de una mirada que dice: quédate, no te vayas. Tan perfecta su forma como su color. Color que dice: te quiero, que susurra un te espero, que canta y dice: me tienes. Ternura que pide un perdón.
Capaz de encontrar una sonrisa en la tristeza, de curar heridas del alma y hasta del cuerpo. 

Robar una flor a una planta y ella dará mil flores más.
Regalar esa flor a un amor y dará mil amores más. 

sábado, 4 de abril de 2015

Más allá de la vida

Empezar a respirar sólo porque hay un comienzo.  Respirar y sentir, respirar y gritar, buscar sin lágrimas un calor, un amor.  Sentirse parte de un todo infinito del que no se conoce principio.  Así comienza la vida.  Es sólo un pedacito de amor, de locura, sin mucho sentido para quien sin saber la posee.  Algo que viene de algún lugar.
Vida en una piel, en un montón de células que solas no son nada, en un conjunto de órganos que armonizan, que transmiten, que buscan la perfección en un pedacito de inocencia que aún no sabe de su alcance, de sus virtudes.
Un pensar que, aún sin poder de decisión, se apropia de un sistema tan pequeño y crece.
Transformar instantes de amor, de pasión, de locura, de entrega infinita y trascender en la magia de la vida.  Perfección e imperfección que luchan por sobrevivir.